30 noviembre 2011

El Origen de los anteojos

Antes de la invención de los lentes, personas con problemas de la vista tenían que trabajar de manera deficiente, pasando por alto los detalles que no podían ver, volviéndose menos productivos.

Aunque no se conoce el inventor de los lentes, se tiene referencia de su mención en un sermón del padre Giordano Rivalto, en febrero de 1306 que dice: “no han pasado aún 20 años desde que el arte de hacer gafas, uno de las creaciones más útiles del mundo, se descubrió. Yo mismo he visto y conversado con el hombre que los hizo primero”. Pero no mencionó el nombre del inventor.

Hasta ese momento los lentes empezaron a montarse en un marco y se sostenían con una mano frente a los ojos, o se sujetaban sobre la nariz. Aún así se extendió rápidamente su uso entre los monjes de ese tiempo, que se contaban entre los pocos que sabían leer.

En Italia floreció la fabricación de anteojos, ya que la Isla de Murano era uno de los centros más avanzados en la industria del vidrio medieval.

Luego, con la llegada de la imprenta en 1452 la proliferación de libros fue un incentivo para que la gente aprendiera a leer, lo que trajo consigo la producción masiva de lentes baratos que se vendían en las calles, montados en armazones de madera, hueso o acero, y los había en metales preciosos para quien los pudiera pagar.

En el siglo XVII la fabricación de lentes se extendió a Inglaterra, España, Francia, Holanda y Alemania, siendo en este último país donde se producían los armazones y lentes de mejor calidad.

Pero fue hasta el año de 1700 que Edward Scarlett le puso al armazón una varilla a cada lado para que los anteojos se sujetaran presionados a cada lado de la cabeza. Esta presión resultaba incómoda después de un tiempo de uso hasta que alguien tuvo la idea de alargar las varillas y curvarlas para que se detuvieran con las orejas, lo que resultó ser muy cómodo.

Desde entonces los anteojos han evolucionado hasta convertirse en nuestros días en un artículo útil y en un accesorio de moda.

Referencia:

Gracias a Erica que siempre encuentra cosas interesantes qué compartir.
Foto de Wikipedia